Lave el pato y, sobre el fregadero, vierta el agua hirviendo cuidadosamente en toda la superficie del pato para escaldarla.
Coloque el pato sobre una rejilla en una charola para hornear.
Mezcle la miel con el agua caliente y barnice el pato dos veces.
Seque el pato durante toda una noche colgándolo en un lugar fresco y aireado. La piel debe quedar muy seca.
Precaliente el horno a 210 °C.
Hornee el pato en la charola para hornear por 30 minutos. Dele la vuelta con cuidado, sin romper la piel, y hornéelo por 30 minutos más. Sáquelo del horno y repose unos cuantos minutos.
Crepas
Mezcle en un tazón la harina con el azúcar; vierta el agua hirviendo. Revuelva y deje entibiar.
Amase por unos minutos y deje reposar durante 30 minutos.
Divida la masa en porciones de una cucharada cada una.
Extienda una pequeña bola de masa con un rodillo formando discos de 8 centímetros de diámetro aproximadamente.
Barnice un lado del disco con aceite de ajonjolí y ponga otro disco igual encima formando un sandwich. Repita la operación, haciendo cuantos sandwiches sean necesarios.
Con el rodillo, aplane nuevamente cada sandwich hasta formar discos de 15 centímetros de diámetro.
En un sartén cueza las crepas una por una. Sabrá que ya están cocidas cuando se inflen ligeramente.
Montaje
Sirva la carne de pato rebanada sobre las crepas con las tiras de pepino y de cebolla y la salsa hoisin.
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